domingo, 23 de enero de 2011

Entrevista con Charles Robert Darwin Wedgewood

Son las 9:30 de la mañana del día 19 abril de 1881, me encuentro en la ciudad de Down, Inglaterra, ¿el motivo? : entrevistar a Charles Robert Darwin Wedgewood.
Si soy sincero, creo que el que me encomendaran una tarea así es algo demasiado tedioso, yo hubiese preferido entrevistar a cualquier otro personaje
Espero que esto tenga algún fruto. Es con estos cuestionamientos que me acerco a una enorme casa, significado de que alguien de clase acomodada vive ahí, una puerta impresionante de madera y enormes ventanas le dan un inigualable toque de elegancia.
Al tocar la puerta recibo respuesta casi de inmediato, es un hombre quien le da un aire al rostro de Darwin pero no me atrevo a preguntar.
Me dice que su padre, el señor Charles Darwin me espera en la puerta del fondo, me dirijo así a ese sitio; la puerta se encuentra entre abierta, entro sigilosamente y veo una habitación adaptada a manera de laboratorio, veo como Darwin observa algo en sus notas, me detengo para poder observar que es lo que estudia.
Estaba tan entretenido observándolo que me quedé perplejo cuando dice:
-Por favor, póngase cómodo...
Solo atiné a dejar mis cosas sobre una silla.
Luego dice:
- Permítame un segundo...
Se disponía a atenderme cuando entró a la habitación el joven que me había abierto la puerta.
Sir Charles Darwin dice:
Él es mi hijo Francis.
Yo contesto: ya tenía el gusto, lo conocí en la entrada. Después de esta torpe presentación, Francis se colocó al lado de su padre.
Cada vez estoy más interesado en realizar esta entrevista, creo que después de todo podré lograr algo importante y es que en su rostro se refleja un cansancio enorme. Su voz asimismo, está cansada, por lo que su hijo le toma del brazo y exclama......
"Puede empezar cuando guste... yo contestaré todas sus preguntas"
El señor Charles Darwin no acepta; Francis le pide que no se esfuerce, pero Darwin lo tranquiliza con sólo tomarle la mano.
Estaba por realizar una pregunta cuando entró a la habitación una mujer de mediana edad diciendo:
- Señor, su té...
Francis hizo una seña para que me sirviera primero, me sirve un poco de té, al parecer de hierbas pues es un aroma muy sutil.
Tomo un poco y mientras lo hago Francis pregunta a su padre el por qué de citarme tan temprano.
Después de escuchar la molestia de Francis, me dispongo a realizar el mayor numero de preguntas en el más corto tiempo.
El señor Charles Darwin me dice que si me encuentro listo, así que tomo mi libreta y un bolígrafo y hago la primera pregunta, algo que quizá aporte poco. Pero debemos empezar con algo ligero y después obtener la mayor información del origen de su obra.
Así que empezamos con las preguntas:
1. ¿ Cuándo y donde nació?
Nací el 12 de febrero de 1809 en Shrewsbury, una villa ubicada en Shropshire, en el oeste de Inglaterra.
2. ¿Quiénes fueron sus padres?
Mi padre Robert Waring Darwin y mi madre Susannah Wedgwood.
3. ¿Qué nos puede decir de ellos?
Mi padre era un famoso médico rural, hombre sencillo, dominante, de 1.90 m de altura y un peso de más de 150 kilogramos y por el cual sentía una gran admiración; mi madre poseía una gran habilidad artística, inventiva y sentido práctico, así como una gran firmeza de carácter. Desgraciadamente la perdí a una edad muy prematura.
4. ¿A que edad sucedió la pérdida de su madre?
Fue le 17 de julio de 1817, cuando yo tenia 8 años.
5. ¿Y que puede decirme de sus abuelos?
Mi abuelo paterno fue Erasmus Darwin, eminente médico y botánico respetado por sus conocimientos de ciencia, literatura y filosofía. Mi abuelo se casó 2 veces y tuvo 14 hijos.
Del primer matrimonio, con Mary Howard, tuvo cinco hijos de los cuales el tercero fue mi padre.
Mi abuelo materno fue Josiah Wedgood quien era un célebre artesano que fabricaba cerámica fina.
6. ¿Es hijo único?
No. Yo soy el quinto de seis hermanos, el segundo varón.
7. ¿Cómo se llaman sus hermanos?
Marianne, Carolinne, Susan, Erasmus Alvey y Catherine.
8. Y dígame, ¿en donde paso su niñez?
En “the mount” (como denomina a su casa) que se encontraba en Shewsbury, a 35 Km de Maer donde vivían los Wedgewood.
9. ¿Y sus estudios?, ¿dónde los realizó?
Hasta los 8 años mi educación estuvo a cargo de mi hermana Carolinne.
10. ¿Y después, a donde asistió?
Asistí un año a la pequeña escuela unitaria del reverendo G. Case. Y luego asistí al gran internado del Dr.Butler; con él acudí de los nueve hasta los 16 años.
11. ¿Y que educación recibió en ese internado?
Solo me enseñaron latín, griego y algunas nociones de historia y geografía antigua.
12. ¿Por qué muestra cierta apatía al nombrar la educación que recibió?
Porque siento aversión por las materias, por las preguntas rutinarias y las contestaciones por receta.
13. ¿Después del internado del Dr.Butler?
Mi padre estaba convencido que tenía futuro en la medicina, así que en octubre de 1825 me sacó del colegio y me envió a estudiar medicina a la universidad de Edimburgo.
14. Así que ¿usted también es médico como su padre y abuelo?
No; después de dos años abandoné la escuela pues no podía soportar ver la sangre y además que también presencié el horrible espectáculo de dos operaciones. Pero sin embargo debes saber que soy licenciado (por la Universidad de Cambridge) en teología, matemáticas euclidianas y en estudios clásicos.
15. ¿Qué hizo durante el tiempo en que no asistió a la escuela?
Me gustaba visitar la casa de mi tío Josiah, quien no solamente era aficionado al igual que yo a las cacerías y paseos a caballo, sino además me tenía un enorme cariño, me comprendía e incluso fomentaba mis aficiones sobre la naturaleza.
16. Se expresa con mucho cariño de su tío, ¿qué significó para usted?
Todo, mi tío Jos fue un hombre ideal.
17. ¿Alguna vivencia especial con su tío Jos?
Quizá los dos viajes en 1827. El primero a Irlanda y luego a París.
18. Después de salir de la universidad de Edimburgo ¿a dónde se dirigió?
Cuando mi padre se convenció de que no seria médico, resolvió que debía ser teólogo. Así que en octubre de 1827 se admitió mi solicitud y al otro año, en 1828 ingrese al Colegio de Cristo, de la Universidad de Cambridge.
19. ¿Cuál era el objetivo?
Como ya mencioné, mi padre quería que estudiara teología para llegar a ser pastor de la iglesia anglicana, así que estudié tres años en ese colegio.
20. ¿Qué fue lo más importante que le sucedió ahí?
El haber conocido al botánico John Stevens Henslow, quien además era sacerdote de la iglesia anglicana.
21. ¿Por qué fue tan importante ese botánico?
Porque los días viernes en casa de él, se reunían alumnos y profesores interesados en las ciencias naturales y se organizaban excursiones.
22. Ya veo, ahí fue donde organizó su excursión alrededor del mundo...
No, ahí es donde me presentaron al reverendo Adam Sedwick. Con quien después realizaría en agosto de 1831 una salida de tres semanas por el norte de Gales.
23. ¿Y por qué significó tanto este viaje?
Por que fue regresando de este viaje, cuando recibí la carta del botánico Henslow.
24. ¿Qué carta?
La carta en la que me invitaba a dar la vuelta al mundo como naturalista no retribuido en la expedición del Beagle.
25. ¿Qué es el Beagle?
Su nombre era H.M.S. Beagle, un bergantín de tres palos, 242 toneladas, 28 metros de eslora, y armado con diez cañones.
26. ¿Quiénes viajarían en el Beagle?
En él debían convivir varios años 74 personas, al mando del capitán de la real armada, Robert FitzRoy.
27. ¿A quienes recuerda?
A Philip King, Augustus Earle, Charles Musters, John Lort Stokes, Simms Covington, Bartholomew James Sullivan y Simms Covinton, quien fue mi ayudante personal.
28. ¿Que opinó su padre cuando le dijo de dicho viaje?
Se negó a consentir que viajase. Porque a su juicio, aquel viaje errabundo no era la mejor preparación para el púlpito.
29. ¿Qué hizo después de la negativa de su padre?
Intentando olvidar lo ocurrido, fui a pasar el final de las vacaciones en la casa de mi tío Jos que intervino directamente, por lo que la tenaz oposición de mi padre fue vencida por sus ruegos.
30. ¿Qué hizo después de que su padre aceptara?
El 2 de septiembre viajé a Cambridge a entrevistarme con FitzRoy.
31. ¿Y cuál fue el resultado de la entrevista?
La entrevista fue franca y cordial.
32. ¿Y cómo fue aceptado?
Yo diría que con mucho trabajo, pues fue necesario realizar sutiles explicaciones acerca de la firmeza de mis convicciones y mi disposición a tolerar las incomodidades del barco.
33. ¿Fueron todos los problemas que enfrentó para realizar el viaje?
No, tenía también palpitaciones y dolores en el corazón, y como muchos jóvenes ignorantes llegué a convencerme de que estaba enfermo del corazón.
34. ¿Qué le dijo su padre?
No lo consulté, pues estaba seguro de que su veredicto sería que mi estado de salud no me permitía emprender el viaje. Y yo estaba dispuesto a ir a cualquier precio.
35. ¿Y cuál era la misión del Beagle?
El H.M.S. Beagle había sido comisionado para continuar el estudio de las costas de la Patagonia y Tierra de Fuego; examinar las costas de Chile, Perú y algunas islas del Pacifico, con el objeto de obtener información para elaborar nuevos mapas y cartas marinas, y además obtener medidas cronométricas, estudiar condiciones climáticas y realizar colecciones geológicas, botánicas y zoológicas
36. ¿Recuerda qué tiempo duró su viaje?
¡Cómo olvidarlo! : Casi 5 años, pues me embarque en el puerto de Plymouth el 27 de diciembre de 1831, día que considero mi autentico nacimiento y regresé a Inglaterra el 2 de octubre de 1836.
37. ¿Qué llevó consigo a dicho viaje?
Objetos personales y mi instrumental.
38. ¿De qué contaba su instrumental?
De un microscopio, un martillo de geólogo, una carabina, una pistola; instrumentos de disección y taxidermia, y una gran cantidad de recipientes y reactivos
39. Debió tener una gran habitación para colocar todo esto ¿es así?
No, al contrario. Mi alojamiento era estrecho; lo compartía con dos oficiales. Era un espacio de 10 por 15 m. Para conseguir sitio para colgar mi hamaca debí quitar uno de los cajones del armario.
40. ¿Qué hizo a su regreso a Inglaterra?
A mi vuelta a Inglaterra en 1836, me puse a ordenar mis colecciones; emprendí la tarea de preparar el material; coordinar los resultados obtenidos, escribir sobre el material recolectado y tomar contacto con numerosos científicos.
41. ¿Dónde fue que se dispuso a realizar todo esto?
En 1837 me trasladé a la calle Great Malborough número 36 en Londres y fue ahí donde me dispuse a comenzar a componer mi obra.
42. ¿Cuándo comenzó a componerla?
Fue en julio de 1837 cuando comencé a componer un preludio, un primer libro sobre la transmutación de las especies. Pero aun no incorporaba el mecanismo principal de la evolución.
43. ¿Y cuál es mecanismo principal de la evolución?
Se trata de la Selección Natural.
44. ¿Podría decirme el lapso en que elaboró su obra?
Entre julio de 1837 y octubre de 1839; un volumen de 900 páginas.
45. ¿Y su vida personal, que sucedió con ella?
El crear mi obra me absorbió durante mucho tiempo, pero contraje nupcias el 29 de enero de 1939.
46. ¿Con quien fue que contrajo nupcias?
Con mi prima Emma Wedgood, nieta de Josiah Wedgood e hija menor de mi tío Jos.
47. ¿Dónde fue que estableció su matrimonio?
Me instalé en una casa ubicada en Uper Gower Street número 12, en Londres.
48. ¿Después de su matrimonio que sucedió?
Mi salud comenzó a decaer. Pero a pesar de ello, en enero de 1842 terminé un manuscrito sobre los corales, que publiqué en diciembre con el nombre de The Structure And Distribution Of Coral Reefs.
49. ¿Qué hizo a consecuencia de su precaria salud?
Me mudé y me establecí en una casa de campo del pequeño pueblo de Down, cerca de Beckenham, condado de Kent a unos 25 Km al sur de Londres, con mi primer hijo, William Erasmus y mi primera hija Anna.
50. ¿Después de William y Anna tuvo más hijos?
Sí, en total fueron 10: William Erasmus, Anna, Mary Eleanor, Henrietta, George, Elizabeth, Francis, Leonard, Horace, y Robert Warring.
51. A no ser por su salud, diría que llevado en esos días una vida sin complicaciones...
No diría eso. Pues no faltaron los momentos amargos, tales como la muerte de mi hija Mary Eleanor el mismo año que nos mudamos a Down. Otro duro golpe fue la muerte del tío Jos, padre de Emma, el 12 de julio de 1843; y la de mi padre, el 13 de noviembre de 1848. El último de mis hijos Robert Waring, murió a los dos años, pero el golpe mas duro fue la pérdida de mi hija Anna, en 1851, cuando ella contaba con diez años.
52. ¿Y sus amigos?
Mi grupo de amigos constaba de un grupo de eminentes investigadores. Este íntimo círculo de amigos estaba formado por Sir Charles Lyell, Sir Joseph Dalton Hooker, Tomas Henry Huxley, Sir John Lubbock, Alfred Russel Wallace y Asa Gray, quienes fueron de constante ayuda en la creación de mi obra.
53. Ahora que menciona su obra ¿podría ampliarnos como fue que surge?
El 28 de septiembre de 1838 leí el ensayo “Un ensayo sobre el principio la población” del clérigo Thomas Malthus; su obra me ayudó a encontrar la explicación, por tanto tiempo buscada sobre la formación de las especies.
54. ¿Qué decía dicho ensayo?
Que las poblaciones humanas tienden a crecer en progresión geométrica, mientras los medios de subsistencia de que disponen lo hacen solo en progresión aritmética.
55. ¿Y como lo aplicó al concepto de lucha por la existencia al reino animal y vegetal?
Deduje que las variaciones que se producen en los individuos de una especie tenderán a conservarse en sus descendientes en el caso de ser favorables, porque a la larga serán eliminados los individuos menos adaptados al medio.
56. ¿Cuándo elabora por primera vez entonces, la teoría de la evolución como un argumento coherente?
En junio de 1842, con un breve bosquejo de 35 páginas y que fue seguido por un ensayo más extenso de 231 páginas, el cual se publicó 16 años mas tarde.
57. ¿Y qué sucedió en esos 16 años?
El hecho más sobresaliente para la teoría fue en 1855 cuando apareció en los Annals and Maganize of Natural History un artículo abiertamente evolucionista titulado "Sobre la ley que ha regulado la aparición de nuevas especies”.
58. ¿ Y quien era el autor?
Era Alfred Russel Wallace, que lo enviaba desde Sarawak, Borneo.
59. ¿Cuál fue su reacción?
Me asombré al comprobar la similitud de las ideas de Wallace con las mías. Por eso desde 1856 intercambio correspondencia con Wallace.
60. ¿Este hecho fue el que más lo sorprendió?
No, el 18 de junio de 1858 recibí por correo un breve manuscrito que contenía todos los elementos esenciales de mi teoría y que se exponía exactamente como la teoría de la selección natural.
61. ¿Y quién era el autor del manuscrito?
También era Alfred Russel Wallace.
62. ¿Cuál fue la reacción a este manuscrito?
Debo decir que me quedé sin palabras; la coincidencia en conceptos e ideas con mi trabajo era en verdad estremecedora, incluso hasta en los términos que ambos usamos, por lo que enseguida quise renunciar a mi prioridad a favor de Wallace, pero Charles Lyell y Joshep Hooker me convencieron que hiciera una primera exposición escrita de la teoría de manera conjunta con la de Wallace.
63. ¿Cuándo fue y qué sucedió?
Fue 1º de julio de 1858; nuestros trabajos combinados recibieron muy escasa atención y la única mención que se publicó al respecto fue la del profesor Haughton, de Dublín, cuyo veredicto fue que: “todo lo que había de nuevo en nuestros trabajos era falso, y todo lo que había de cierto era viejo”.
64. ¿Qué causó en usted esto?
Abandoné la idea de terminar mi monumental obra de las especies, por lo que me retiré un año a reelaborar el proyecto anterior.
65. ¿En qué fecha exactamente fue publicada su obra?
Tras 23 años de maduración, publiqué mi gran obra, el 24 de noviembre de 1859, con el nombre de On the Origin of Species by Means of Natural Selection of the Preservation of Favored in the Struggle for Lite; creo que es mejor conocida como “El Origen de las Especies”.
66. ¿Y cuales fueron las reacciones que provocó?
Innumerables criticas que no provenían del ámbito científico, sino religioso. Sin embargo puedo contarte también que Karl Marx quiso dedicarme la traducción inglesa de su obra “El capital” a lo que atentamente me negué, y bueno, después de eso me retiré a Down.

Así fue como terminaron mis preguntas; Sir Darwin me invita a merendar, pues hemos estado todo el día en esa habitación tan entretenidos que nos olvidamos de comer.
Después de merendar con Darwin, me retiro con lo que creo será un gran artículo.

Hoy han pasado 2 años de la entrevista, he regresado y me he encontrado con Francis quien me ha dicho que su padre falleció hace un año tras un ataque al corazón que sufrió la noche del 18 de abril; la gravedad de su estado se hizo irreversible, produciéndose su muerte a las tres y medía de la tarde del día 19 de abril de 1882, a los 73 años. Me informa que fue enterrado en la abadía de Westminster el 26 de abril de 1882, junto a Sir Isaac Newton.

Antes de despedirme le pregunté ¿qué opinión tienes de tu padre?
Él era un hombre extraordinariamente modesto, tranquilo y amable, que evitaba por todos los medios herir los sentimientos de los demás. Amaba su trabajo, pues poco antes de morir escribió a un amigo: “cuando me vea obligado a renunciar a la observación y a la experimentación, moriré”.
Y concluyó su respuesta diciendo:
Creo que mi padre fue sobre todo un gran observador, pues sus observaciones e investigaciones, le llevaron a escribir 18 importantes obras y cantidad de diferentes artículos, tengo el honor de decir que yo colaboré con él en una de sus últimas obras, la cual trata sobre el movimiento de las plantas.
Así nos despedimos, Francis (que me he enterado es botánico) se marcha un tanto afligido, y yo, con esta breve conversación, regreso al presente, estando seguro que Darwin es uno de los hombres que en verdad nunca morirán.

Entrevista a Lamarck

Me encuentro en uno de los tantos barrios pobres de la ciudad de París, en Francia. ¿La causa?, tratar de entrevistar al gran investigador llamado Lamarck. Me han informado que vive en una de las muchas casas, las cuales se observa inmediatamente que no son lujosas, al contrario: la pobreza salta en cada calle, las cuales cruzo tratando de localizar el sitio en donde me han dicho que él habita.
Después de mucho buscar y preguntar, llego; luego de explicar el motivo de mi visita, una joven me indica que regrese en otra ocasión, pues el señor Jean Baptiste se encuentra ocupado; insito en platicar con Lamarck, pero de manera atenta me invita a regresar en otra ocasión; estoy a punto de abandonar la casa, cuando del interior se escucha una voz cansada: es el propio Lamarck que pide me lleven ante él.
Lo observo, pero parece no notar mi presencia, la joven que me recibió, dice: está casi ciego, trata de no incomodarlo, Lamarck interviene: no importa, hace tanto tiempo que nadie me visita que me dará gusto platicar con alguien que se interese en mi trabajo. Ante lo cual inicio la entrevista:

1. ¿Cuál es su nombre?
Me llamo Jean-Baptiste-Pierre-Antoine de Monet, caballero de La Marck.

2. ¿Es usted La Marck o Lamarck?
Mi título nobiliario es como caballero de La Marck, pero como ciudadano común, simplemente soy Lamarck.

3. ¿Cuándo y en dónde nació?
El 1º de agosto de 1744 en Bazantin, una pequeña aldea situada en Le Petit Picardie, Francia.

4. ¿Tuvo usted hermanos?
Fui el undécimo hijo de una familia ocupada desde muchas generaciones en el arte de guerrear.

5. ¿Cómo fue su juventud?
Por voluntad de mi padre ingresé al seminario de los jesuitas de Amiens; pero al morir él, en 1760, abandoné el seminario. Cuando tenía 17 años, me incorporé como voluntario al ejército que intentaba poner fin a la Guerra de los Siete años.

6. ¿Qué pasó ahí?
Estuve poco menos de un año, luchando de forma heroica y valiente contra el ejército alemán en Villinghausen, por lo que el 16 de julio de 1761, obtuve el grado de oficial, sin embargo por una travesura que me hizo otro oficial, quedé lesionado del cuello, por lo que tuve que ser dado de baja del ejército, lo que me obligó a trasladarme a París.

7. ¿Y en París, que hizo?
Me instalé en el barrio latino, fui empelado de un banco, periodista y músico; estudié medicina y me comencé a interesar por la botánica; leí todos los libros sobre el tema de flores y plantas e interrogaba a los viajeros sobre los vegetales desconocidos.

8. ¿Cuáles fueron los resultados de sus estudios en la botánica?
Bueno, cuando yo tenía 34 años publiqué mi primera obra: “Flore Francaise” (La Flora Francesa), este trabajo me abrió las puertas de la Academia de Ciencias, ya que propuse un nuevo método taxonómico: el método dicotómico y con esto, gané la confianza del maestro Buffon.

9. ¿Y en la Academia, que trabajos presentó?
En 1778, la memoria “Investigaciones sobre las causas de los principales hechos físicos”, pero cuya publicación se realizó hasta 1794.

10. ¿Qué otras actividades realizó?
Buffon confió en mi la dirección de una misión científica por Europa central en 1780 con el objeto de enriquecer la colección de plantas del “Jardin du Roi” (Jardín del Rey), sin embargo me acompañó el hijo del maestro Buffon al cual tuve que llevar a visitar los jardines botánicos de Holanda y Alemania entre otros, pero acabé teniendo algunos problemitas, (que no vienen al caso recordar) con ese muchachito.

11. ¿Hubo alguna consecuencia de esto?
Sí, pero afortunadamente fue buena, ya que Bufón (que seguramente conocía muy bien a su hijo) era además un elegante naturalista y me recompensó generosamente; además Luis XVI se enteró que yo era botánico y ordenó que se me nombrara custodio o guardián del herbario del Jardín del Rey; siempre estuve agradecido pero nunca me identifiqué con la monarquía.

12. ¿Algo que recuerde y desee contarme?
Bueno, al triunfo de la Revolución solicité a la Asamblea Nacional la reforma del Jardín del Rey, la cual fue aprobada el 10 de junio de 1793 por lo que gracias a mi gestión, se creo el Museo Nacional de Historia Natural, y 12 cátedras.

13. ¿Y usted impartió clases?
Así es, impartí mi primer curso el 30 de abril de 1796 y a la vez comencé a escribir mi “Filosofía Zoológica”.

14. Imagino que a partir de esa época, su vida fue tranquila, ¿verdad?
No, yo siempre fui partidario de la Revolución, y el 9 de noviembre de 1799 hubo un golpe de estado, la República cayó y se instauró una dictadura; la Universidad debería regirse bajo los preceptos de la religión católica, de la fidelidad al Emperador, a la monarquía imperial y a la dinastía napoleónica, por lo que comencé a tener algunos problemas.

15. ¿Cómo cuáles?
Bueno, Napoleón Bonaparte expresó su desprecio hacia mis trabajos, a lo que respondí manifestando mi disgusto hacia quienes tienen el poder y no lo emplean para hacer el bien.

16. Pero usted siguió trabajando en la docencia, ¿no es así?
Sí, el 11 de mayo de 1800, en mi lección inaugural del curso de zoología de los animales sin vértebras por primera vez hablé de la evolución de animales y plantas; por lo que inicié un texto llamado “El sistema de los animales sin vértebras”, por lo que a mi se debe el término de “invertebrados”.

17. ¿Dice usted que habló de la evolución?
No solo eso, en 1802, en mi obra “Investigaciones sobre la organización de los cuerpos vivientes” traté nuevos problemas como el origen de la vida; y en 1803 publiqué los dos primeros volúmenes de “Historia Natural de los Vegetales” y ya para 1809 la que considero mi gran obra maestra: “Filosofía Zoológica”.

18. ¿Qué considera usted que es lo más importante de esa obra?
Bueno, creo que fueron muchas cosas, como te he dicho, por primera vez en la historia, y en esa mi obra, aparece formulada una teoría positiva de la evolución de los seres vivos, a la vez que propongo el nombre y la creación de una nueva ciencia.

19. ¿Una nueva Ciencia?, ¿Cuál?
La Biología, la cual defino como la obra que presenta los resultados de mis estudios sobre los animales, sus caracteres generales y particulares, su organización, las causas de su desarrollo y su diversidad, y las facultades que de ellas obtienen.

20. Maestro, perdone usted mi indiscreción o tal vez mi ignorancia, pero tengo entendido que su teoría de la evolución es incorrecta y que...
Sí, sí, ya sé, este “señor”, yo diría “jovencito mal criado” de Georges Cuvier ha hecho lo indecible para desacreditarme, para que los colegas se burlen de mí y para..., bueno tu que puedes ver, te darás cuenta que vivo en el olvido, la pobreza, y ciego; pero te diré una cosa (en ese momento noto que Lamarck comienza a enojarse): ¡la “teoría incorrecta” que propongo se basa en leyes naturales, sin la intervención de “milagritos”, nada de argumentos bíblicos ni destrucciones ni catástrofes realizadas por un Dios hacia sus hijos, animales y plantas!... ¡no, no y no! ¡Caramba!
¿Hasta cuando se dará cuenta la gente que este imbécil de Cuvier está equivocado? Sabrá mucho de fósiles, pero el muy tonto no entiende que son restos de organismos antiguos, que ningún Dios ha destruido, sino que se han transformado al paso del tiempo, es decir, han evolucionado...

21. Perdón Maestro, no fue mi intención hacerlo enojar...
Sí, y seguro ahora vas a comenzar a preguntarme más de esas cosas que se me atribuyen, pero para que no pierdas tu tiempo en tonterías, de una vez te digo: nunca he dicho que los organismos tengan “un impulso hacia la perfección”, sino que la evolución transcurre de lo simple a lo complejo, sin negar que pueda haber regresiones causadas por respuestas a entornos locales; tampoco estoy en contra de Dios, ya que yo creo en Él, pues soy deísta, y como tal creo que fundó la materia y se ha abstenido de intervenir directamente mediante milagros en el curso de la evolución. ¡Ah¡ y también te digo que Treviranus y Oken han empleado al igual que yo la palabra Biología, digo, para que no pienses que me quiero apropiar el término, solo que yo lo he definido y he tratado de explicar más a fondo.

22. Maestro, le pido me disculpe, sé que las críticas de Cuvier lo han molestado mucho, no fue mi intención recordar esos ratos amargos.
Discúlpame tú a mí, te darás cuenta que no soy más que un viejo tonto, ya ves, por emplear mucho la lupa de observación he quedado ciego y le he dado el mejor argumento a mi peor enemigo de atacarme diciéndome que la mejor prueba que la función no crea al órgano está en mi propio proceso de ceguera. Sé que mi teoría tal vez no es correcta, pero sé también que “el gran Cuvier” está equivocado en más cosas que este viejo tonto...

En esos momentos la joven que me recibió interrumpe diciendo: “papá, ya es hora de que descanses”.
Me levanto y despido de Lamarck; trato de retirarme, pero ella me hace una señal para que no me vaya; espero en lo que Lamarck se aleja.
Despacio y caminando con dificultad Lamarck se retira, la joven regresa, (quien me entero se llama Cornelia y es hija de Lamarck) y dice:

Tal vez hayas escuchado cantidad de cosas en contra de mi padre pero, grábate esto: nunca antes de él, alguien había afirmado que los seres vivos cambian, que no han existido las catástrofes; que la función precede a la forma; él ha explicado de manera correcta la existencia de los fósiles, mi padre también erradicó la idea de Aristóteles y Linneo de que hay animales con y sin sangre. Además ha roto con el dogmatismo que representan el creacionismo y el fijismo, y ha sido el fundador de la zoología y paleontología de los invertebrados, además de sostener que todas las especies, incluyendo al hombre, descienden de otras especies.
Es un sistemático que ha clasificado a los vegetales, a los invertebrados; y además, separó a los insectos de los crustáceos y de los arácnidos. Y como sé que no tienes mucho tiempo, y ya para terminar, ha dicho que el funcionamiento del organismo debe ser tomado como una totalidad, como un conjunto integrado de funciones y de órganos.

Solo alcanzo a decir: disculpa mi ignorancia, nunca fue mi intención molestarlos, únicamente quise saber un poco del maestro Lamarck.

Cornelia contesta: perdóname, creo que también me exaltado, pero date cuenta a donde ha venido a dar la grandeza de mi padre que es un gran hombre y un gran maestro y todo por algunos errores, errores que no le han sido señalados a Cuvier por estar totalmente de acuerdo que la Tierra y todos los seres vivos han sido creados tal y como los conocemos hoy, y que todo permanecería igual por los siglos ¡a no ser que se produzca otro diluvio!

Me despido, y aunque un poco apenado, regreso tratando de investigar algo más sobre la obra del tan desacreditado Lamarck.

Me he enterado que Lamarck se casó y enviudó cuatro veces; que la dictadura bonapartista influyó de manera negativa en la libertad intelectual y que Lamarck publicó unos “Anuarios Meteorológicos” (1799-1810) llenos de errores, lo que le valió el descrédito oficial, que coincide con el progresivo prestigio que fue adquiriendo Cuvier.

Lamarck murió en París el 18 de diciembre de 1829, a los 85 años de edad; las críticas de Cuvier llegaron al colmo del mal gusto y a la falta de decoro, que censuró la obra del maestro, nada menos que en su funeral.

TEORÍAS TRANSFORMISTAS

Teoría de la Selección Natural
Los británicos Charles Darwin y Alfred Russel Wallace trabajaron de forma independiente, realizaron extensos viajes y, casualmente, desarrollaron la misma teoría acerca de cómo cambió la vida a lo largo del tiempo así como también el mecanismo para ese cambio: la selección natural.
Darwin (1809-1882)

Nació en Shrewsbury, Inglaterra e hizo estudios inconclusos en medicina y para clérigo. Tanto su abuelo Erasmus Darwin como su padre Robert W. Darwin, eran médicos renombrados. Ambos ejercieron sobre él una gran influencia.
Darwin era aficionado a la geología, lo que le permite más adelante hacer interpretaciones sobre los estratos geológicos en los procesos de fosilización. El Almirantazgo Británico realizó una expedición cartográfica alrededor del mundo, e invitó a Darwin a realizar estudios sobre botánica, zoología y geología. A la edad de 22 años, Darwin se embarcó el 27 de diciembre de 1831 en el H.S.M. Beagle. El viaje duró 5 años, comenzando por las costas de Sudamérica y luego alrededor de todo el mundo.
Darwin colectó especímenes de plantas, animales y fósiles y realizó extensas observaciones geológicas. Se percató que había una gran diversidad de especies de plantas y animales en las costas tropicales a diferencia de las especies europeas. En un principio, estaba convencido de la invariabilidad de las especies, sin embargo al advertir la gran diversidad empezó a dudar de ello. Cuando desembarca en las islas Galápagos, frente a Ecuador, observó las especies de pinzones y tortugas gigantes y advirtió sus adaptaciones a los diferentes hábitats isleños, qué, aunque emparentadas entre sí, las formas estaban diferenciadas.
Darwin sabía que el hombre había podido producir diversas y múltiples formas de vegetales y animales domesticados por medio de la selección artificial (por ejemplo, variedades de maíz, razas de perros, etc.). Este es un modelo de lo que ocurre en la naturaleza como resultado a cambios parecidos de las fuerzas naturales durante largos períodos de tiempo.
Darwin estaba convencido que las especies de animales se desarrollan en direcciones muy diversas tan pronto como se aíslan geográficamente unas con otras (principio de la idea de la variabilidad). Sin embargo no sabía el mecanismo de cómo se llevaba a cabo, hasta que llegó a sus manos el libro “Ensayo sobre el Principio de Población”, de Robert Thomas Malthus (1766-1834).

Éste menciona que mientras las poblaciones humanas crecen en una proporción geométrica (por ejemplo, 4, 8, 16, 32, etc.), los alimentos crecen en una progresión aritmética (por ejemplo, 2, 4, 6, 8, etc.) lo que trae como consecuencia las guerras y la muerte por hambruna. Darwin pensó que en el reino animal pasaba lo mismo, que los animales tenían que competir entre los de su misma especie y con los de distintas especies para sobrevivir, deduciendo la “lucha por la existencia” (principio del pensamiento maltusiano)
Darwin observa que los animales depositan miles de huevos, sin embargo la población permanece constante, y concluye que casi todos mueren a una edad temprana y únicamente los individuos más fuertes, rápidos, astutos o con buen camuflaje escapan de sus predadores, lo que no sucede con los débiles. El ambiente actúa como filtro, realiza un proceso de selección natural de los individuos, eliminando aquellos que no se aclimatan, los que sufren los embates de los agentes patógenos o la competencia (principio del concepto de la selección natural).

Darwin plasmó lo anterior en su obra, pero sus planes se vieron frustrados por Alfred Russell Wallace (1823-1913). Wallace pasó muchos años en Sudamérica recolectando animales para los museos ingleses. En 1854, abandonó Inglaterra para estudiar la historia natural de Indonesia. Al hacer un recorrido por el Archipiélago Malayo observó que su fauna se asemejaba a las especies de Asia. De esta manera dedujo que las especies podían transformarse y en julio de 1858 publica sus ideas en un artículo, el cual, define por primera vez el rol de la selección natural en la formación de las especies. Al revisar la obra de Malthus, llega a la misma conclusión que Darwin en la lucha por la existencia en el reino animal.
Wallace envía a Darwin un manuscrito en que detalla que sus conclusiones eran iguales a su aún no publicada teoría. Con conocimiento de causa, Darwin se apresuró en publicar, el 24 noviembre de 1859, su mayor tratado, El Origen de las Especies después de 21 años, pues había proyectado su publicación para después de su muerte. En la Sociedad Linneana, se leen primeo los textos de Darwin seguidos por los de Wallace. Debido a este evento, Wallace coautor de la teoría de la Selección Natural, permanece en el olvido hasta nuestros días. Si bien esta teoría se le atribuye generalmente a Darwin, es justo y necesario mencionar que ambos, Darwin y Wallace, la desarrollaron. Un punto crucial de las teorías darwiniana y lamarckiana es que no explican adecuadamente las variaciones que presentan los individuos y que tienen que ser forzosamente heredadas; en caso contrario, únicamente afectaría a un grupo numeroso de organismos, pero no al total de la especie.
Mendel, publicó en 1866 sus descubrimientos sobre las leyes de la herencia, sin embargo, Darwin nunca tuvo conocimiento de tales investigaciones lo que le impidió comprender la relación existente entre la selección natural y “los efectos del uso y del desuso”.

En resumen, podemos considerar las ideas de Darwin en cuatro puntos:
1. Las especies se originan unas de otras por una serie de variaciones y mutaciones aleatorias, las cuales han ocurrido a lo largo del tiempo.
2. El proceso evolutivo es continuo y gradual en todos los individuos, esto es, no ocurren saltos ni interrupciones, en donde una forma pase a otra muy distinta.
3. Todos los organismos semejantes están relacionados por medio de su historia evolutiva, donde se observan antepasados comunes.
4. La selección natural condiciona el curso del proceso evolutivo, es decir, la evolución de las especies no está forzada ni dirigida por una presión ajena a dicho proceso, sino que es un resultado aleatorio.

LA EVOLUCIÓN, PROCESO QUE EXPLICA LA DIVERSIDAD DE LOS SERES VIVOS

Aristóteles desarrolló su Scala Naturae, o Escala de la Naturaleza, para explicar su concepto del avance de las cosas vivientes desde lo inanimado a las plantas, luego a los animales y finalmente pone al hombre en la "cumbre de la creación".
En la Edad Media se aceptaba la tradición judeocristiana, es decir lo que decía el Génesis del Antiguo Testamento, con su especial creación del mundo construido literalmente en seis días.

Teorías Fijistas
Estas teorías, sostenidas hasta el siglo XVIII, pretendían darle forma científica a la explicación bíblica sobre la creación (también se les llamó creacionistas). Afirmaban que no hay procesos de cambio, que las características de los seres vivos habían permanecido invariables y que el número de especies en la Tierra siempre había sido igual, desde que éstas fueron creadas.
El arzobispo irlandés James Ussher, a mediados del siglo XVII, calculó en 5,000 años la edad de la Tierra basado en la genealogía del Génesis. De acuerdo a sus cálculos, la Tierra se formó el 22 de octubre del 4004 a.C. Los geólogos modernos calculan que la edad de la Tierra es de aproximadamente 4,500 millones de años.

Teoría del catastrofismo.
Cuvier
Según George de Cuvier (1769-1832), los seres vivos fueron creados por Dios, pero algunos desaparecieron como consecuencia de diferentes cataclismos (el más reciente, el diluvio universal), acaecidos en épocas remotas que acabaron con la fauna y flora existentes. Las que sobrevivían permanecían invariables y tras cada catástrofe se producía una nueva creación divina. Llegó a contabilizar 27 creaciones, apoyándose en la reconstrucción de huesos fósiles. De esta manera explicaba la existencia de organismos extintos que se conocían sólo por sus restos fósiles.

Teorías transformistas
Las ideas transformistas o evolucionistas establecen que las especies derivan unas de otras por una transformación a través del tiempo, que las especies no han aparecido de la noche a la mañana y que deben tener antecesores.
George de Buffon (1707-1788) propuso que las especies (pero solo las no creadas por acción divina) pueden cambiar. Esto fue una gran contribución al primitivo concepto de que todas las especies se originaban de un creador perfecto y por tanto no podían cambiar debido a su origen.
En 1795, James Hutton, expuso la teoría del uniformismo, que planteaba que ciertos procesos geológicos operaron en el pasado de la misma forma que lo hace hoy en día. Por lo tanto muchas estructuras geológicas no se explicaban con una Tierra de solo 5,000 años.
Durante el siglo XIX El británico Charles Lyell refinó las ideas de Hutton, y concluyó que el efecto lento, constante y acumulativo de las fuerzas naturales había producido un cambio continuo en la Tierra, su libro “Los Principios de la Geología” tuvo un profundo efecto en Charles Darwin y Alfred Wallace. Tanto Hutton como Lyell ofrecieron la explicación del tiempo para la evolución.

Teoría de la herencia de caracteres adquiridos.
Lamarck
El naturalista francés Jean Baptiste Lamarck (1744-1829), examinando fósiles, estimó que por milenios algunas especies permanecieron sin cambios y otras se transformaron estableciendo que los organismos más complejos evolucionaron de organismos más simples preexistentes. Concluyó que las especies cambian a través del tiempo al adaptarse a nuevos ambientes y que los padres pasan sus rasgos a sus hijos.
En 1809, Lamarck fue el primero en presentar una teoría que explicaba que las especies provenían de otras mediante cambios sucesivos, la teoría de la herencia de lo caracteres adquiridos, que consta de dos principios: la ley del uso y el desuso y la teoría de los caracteres adquiridos.
La ley del uso y el desuso plantea que los organismos se ven obligados a utilizar determinados órganos con mayor o menor intensidad; por su uso o desuso los órganos tienden a formarse, desarrollarse o atrofiarse. En la teoría de los caracteres adquiridos el ambiente y las circunstancias influyen en la forma y estructura de los seres vivos. Estas modificaciones llevan al animal a la adquisición de nuevos hábitos, y en consecuencia forman de nuevas estructuras o modifican algunas partes del cuerpo (el principio de la función crea al órgano). Como ejemplo planteó que el cuello de los ancestros de las jirafas era mucho más corto que el de las jirafas actuales. Al tratar de alcanzar las hojas de los árboles, las jirafas estiraban sus cuellos, y por ello se hicieron un poco más largos. La teoría establece que los caracteres adquiridos durante la vida de un individuo se heredan, es decir, se transmiten a la progenie. El rasgo “cuello largo” que las jirafas adquirían pasaba a sus descendientes y así los hijos tendrían el cuello mucho más largo que los progenitores.

Lamarck falló en su creencia de que los padres podían pasar sus características adquiridas a sus descendientes. En la actualidad esta idea ha sido superada, pues el ámbito de la genética no se conoció bien hasta después de su muerte. En la actualidad ningún científico acepta las teorías de Lamarck, ya que se sabe que los caracteres adquiridos no son heredables. Tampoco se admite que exista una "dirección predeterminada" en la evolución.

QUÉ ES LA EVOLUCIÓN BIOLÓGICA?

En el sentido más amplio, la evolución es meramente una serie de cambios que se presentan a lo largo de la línea del tiempo. Y este proceso involucra prácticamente a todo cuanto existe y es objeto de estudio por parte de la ciencia desde el momento en que estudia y analiza la evolución del mismo Universo. Desde esta perspectiva, todo lo que existe en el universo es objeto de su propio proceso evolutivo. Así entonces, la evolución biológica es un cambio en las propiedades de las poblaciones de organismos que va más allá de la vida individual de cada ser. Los cambios considerados como evolutivos son aquellos que pueden heredarse a través del material genético, de una generación a la siguiente. La evolución biológica puede ser imperceptible o trascendente; desde cambios sutiles en la proporción de diferentes alelos dentro de una población (tal como los que determina el grupo sanguíneo) hasta las alteraciones sucesivas que marcan el desarrollo desde el organismo más primitivo hasta los seres vivos más complejos.
La evolución es el gran principio unificador de la Biología, sin ella no es posible entender ni las propiedades distintivas de los organismos, sus adaptaciones al medio ambiente; ni las relaciones de mayor o menor proximidad que existen entre las distintas especies.
La historia de la vida es una historia de extinciones y muerte, con unos pocos supervivientes. El 99.9 % de las especies que han existido alguna vez sobre este planeta están hoy extintas.La evolución es un concepto asombroso e importante, más crucial actualmente para el bienestar humano, para la ciencia y para nuestra comprensión del mundo que nunca antes. Es también profundamente convincente. Las pruebas que la sustentan son abundantes, crecientes, sólidamente conectadas y fácilmente disponibles en museos, libros y revistas populares y de texto, y en un cúmulo de estudios científicos evaluados por expertos de todo el mundo. Nadie tiene por qué aceptar al proceso evolutivo como una cuestión tan solo de pura fe.